EXPOSICIÓN
Retrospectiva

GALERÍA
Virtual

ARTISTA
Alejandro Núñez Ureta
CURADURÍA
Alejandro Núñez Yukimura

PERIODO
Agosto

DARÍO PARIENTE GUZMÁN
Por razones de amistad y admiración quisiera decir algo a quien fue mi amigo Alejandro Núñez Ureta:
Era un acuarelista consumado, sus conversaciones sobre todos los temas de la cultura universal me impresionaron a cada instante. Gocé con su sabiduría, introvertido con quienes no conocía, derrochaba gestos y palabras agradables con las personas que simpatizaba.

JARDIEL LUQUE
Nombres determinantes en la Escuela de la Pintura Realista en Arequipa (son varios) entre ellos y como el mayor de todos los acuarelistas, nuestra venia para Alejandro Núñez Ureta, cuya acuarela alcanza, después de un proceso creativo, amplio y extenso, la cualidad de ser la magistral y mayor de la misma Arequipa y por tanto, en el Perú. En ninguna acuarela de Don Alejandro hay utilización alguna de tintas superpuestas, como sucede en algunos casos a los que se denomina ahora “trucarelas”.
En sus magistrales acuarelas no hay líneas rectas, sino mejor imprecisas como lo están en la arquitectura y las montañas perfiladas por temblores y terremotos… (su obra) es hermosa, sus surcos contrastan con los cobaltos de su cielo, los unos son generacionalmente sienas y en sus cerúleos, el cielo de Arequipa.

GOYO MENAUT
Recuerdo que “en carnaval” la peña taurina participó en el desfile con un carro alegórico, diseñado y arreglado por Alejandro Núñez, que vestido de torero junto con otros socios, participó en el carro y ganó el primer premio del desfile.

MANUEL GALLEGOS SANZ (destacado escritor y periodista)
El nombre de Alejandro Núñez Ureta es evocación, conjuro, que bulle en los sentidos, que se hace brote de luz en el corazón, y es porque fue noble, sencillo, transido de amor por la belleza.
Cuantas veces le vimos en el campo, sorprendido ante el espectáculo maravilloso del amanecer, ante el gajo en potencia, hurgando en los matorrales, atento al arrullo de las aguas o tratando de descifrar el zumbar bronco misterioso de los insectos. Y es que fue el pintor de la naturaleza.

MAX NEIRA GONZALES (notable poeta y maestro)
Alejandro me confesó: “yo no soy pintor, soy un trabajador”, aquella afirmación no solo era de humor y humildad, sino la realidad; asimismo, días antes de su muerte preparaba una exposición de sus últimos cuadros, de esa obra llena de color y paisaje, por donde se filtra como un aire de ternura, de armonía, un amor hacia las cosas, hacia los hombres.
Conciencia de la identidad esencial, esa necesidad contenida de acercarse, con afecto, en la mayor distancia al calor de la vida, a sus manifestaciones más puras, se siente, aunque muda, en toda la actividad plástica de Alejandro Núñez Ureta.

LUIS PALAO BERASTAIN
Me contó Marove (pintor, periodista y amigo de Alejandro), él era muy apasionado pintando, no solo entraba a la picantería sino vivía la picantería…. Pintores como Alejandro no sé si aún los hay. Si los hubiera ¡vamos a verlos Manuel!

TEODORO NÚÑEZ URETA
Decía: “Alejandro es el pintor de los pueblos arequipeños, de los senderos del campo, de las arboledas y de las montañas, de la gente en el trabajo campesino, de los viejos muros de sillar, de los patios de vecindad, de las costumbres y de los tipos; ha registrado todos los matices y casi todos los asuntos de Arequipa”

CARMELA NÚÑEZ URETA
Recuerdo a mi hermano Alejo, como todo un artista nato, un hombre bueno, lleno de ternura y de tristeza que supo poner en sus cuadros lo más bello y perdurable de su tierra querida.

CALVO DE ARAUJO
El artista demuestra su amplio dominio de la acuarela, la limpidez del color y del dibujo, la composición, la luz quebrada en el laberinto de sillares, en el accidentado terreno, los verdes delicados y el cielo diluido, consiguiendo así una verdadera obra de arte.

MARCELO MARTÍNEZ GÓMEZ (artista del pincel y la pluma)
Dice: “Mucho se ha especulado sobre los grises, o lo gris de sus acuarelas, Posiblemente esos grises fueron el crisol o el tamiz que puso al sol y a la inigualable diafanidad de su Arequipa por la que trajinó amalgando el polvo de la madre tierra con su transparencia, buscando el motivo, encontrándolo y poseyéndolo siempre con el alma exuberante y sus ojos avizores…. Lo conocimos sonriente y jocoso muchas veces, diciéndole un poema de su cosecha, esgrimiendo fina ironía entre sus labios, en medio de abrazos efusivos y sin pronunciar jamás alguna queja”

CLEOFÉ PACHECO
Alejandro fue autodidacta en la pintura y de su labor pictórica se ha hablado mucho, se desarrolló en la técnica de la acuarela, con un estilo sólido y transparente, colores vibrantes y ricas gamas con motivos y costumbres arequipeñas.

DIARIO EL PUEBLO 1980
Sus admirables creaciones captaron la belleza bucólica de los distritos de Arequipa en forma excepcional…. Sus acuarelas muestran pureza en el tratamiento del color, profunda plasticidad y excelente equilibrio de composición. Los rincones aldeanos, el paisajismo de la campiña arequipeña, el poético colorido campestre mistiano…, están perpetuados en su obra.
En sus cuadros es posible observar la fuerza, vivacidad y esplendor de los colores aplicados y que muchas veces centró su atención en añejos troncos, viejos árboles que hacían marco a los volcanes tutelares de su amada Arequipa y que servían, al mismo tiempo, de eje para sus paisajes.

MIGUEL ANGEL CUADROS HUALPA
Ha logrado desarrollar un estilo que se caracteriza por la precisión de las líneas y por el colorido fresco y alegre, considerado como el mejor acuarelista nacional.

MUSEO HISTÓRICO MUNICIPAL DE AREQUIPA
Alejandro Núñez Ureta es el acuarelista mayor de la pintura Arequipeña, el más genuino y apasionado de los acuarelistas de campo traviesa, de resolución espontánea y de sabio equilibrio tonal.

PERCY HURTADO PAREDES
Alejandro he caminado por tus chacras, por tus calles, entré a tus patios, vi tus vitrinas, comí tus rocotos, me humedecí en tus estanques, tus acequias.
Sentí en muchas de tus acuarelas calor, mucho calor, en otras sentí frio, sentí el olor a barro húmedo después de la lluvia, he disfrutado de tus infinitos verdes, de tus sombras, grises y transparentes.
Aguadas, húmedas, secas; el pincel se mueve constantemente, pone el color, degrada, carga, recarga, siempre limpio, los cielos, las nubes blancas, cobalto claro, gris, gris.
Tus flores bellas, fuentes frescas teñidas con tintes naturales, rosas, margaritas, gitanas en maceteros.
Tus pequeñas estampas toreras dicen de tu afición y tu concepto en composición, taller maderas, bella paciencia, minucia que acaricia, excelente tallador.

EUSEBIO QUIROZ PAZ SOLDÁN
Tenía auténtica vocación por la pintura y en algún momento pensó y lo expresó así: “deseaba retirarse de su trabajo de arquitecto para dedicarse a tiempo completo al arte, ya que solo podía hacerlo los días domingos”.
Tuvimos una verdadera amistad en la que está presente su familia, que al paso del tiempo, ni la ausencia física de Alejandro enfriarán la calidez del vínculo creado con el gran pintor, al que ahora recordamos con respeto, admiración y afecto.

WALTER MÁRQUEZ (Escritor)
Cuando uno ve las acuarelas de Alejandro Núñez Ureta piensa en la reconciliación con la naturaleza, porque el hombre es naturaleza y es parte de la naturaleza, humilde servidor y rey de ella.

OMAR ZEVALLOS VELARDE (en su libro los Acuarelistas Arequipeños 1840 – 1940)
Es posible que Alejandro sea hasta hoy el mejor acuarelista que ha tenido Arequipa y que lamentablemente no ha sido reconocido como tal de manera oficial, pero es en este nivel donde lo ubican la mayoría de artistas y conocedores, por su extraordinario manejo del color y la transparencia, sin artificios ni veladuras tramposas, sino con la maestría que solo tienen los verdaderos genios del arte.
Después de Vinatea Reinoso, Alejandro es el acuarelista más seguro y de mayor calidad que ha producido Arequipa. Su influencia será siempre positiva.